La Escuela de Artes y la cátedra de Fotografía del Departamento de Periodismo de la Facultad de Ciencias y Humanidades participan en el proyecto de Memoria Histórica desarrollado por la Asociación Sumpul, Memoria Histórica Sobreviviente – El Salvador, la Western University de Canadá, Universidad KU Leuven de Bélgica y la Social Sciences and Humanities Research Council of Canada (SSHRC).
En el proyecto estudiantes de la Escuela de Artes diseñarán materiales artísticos visuales sobre los sitios y la temática de memoria histórica. Por su parte la Cátedra de Fotografía del Departamento de Periodismo da cobertura al proyecto y documenta testimonios de sobrevivientes para la creación de material audiovisual sobre las masacres ocurridas en sitios no muy conocidos en el departamento de Chalatenango durante el conflicto armado.
“Este proyecto trata de rescatar testimonios donde hubo masacres y generar espacios para el rescate de la memoria como monumentos, museos y otras iniciativas arquitectónicas”, explica Iván Hernández, docente del Departamento de Periodismo.
Andrés Palacios, estudiante del Departamento de Periodismo considera importante recopilar los testimonios de los sobrevivientes de estos sitios y que con este proyecto se estén construyendo espacios para que la memoria de las víctimas no quede en el olvido.
El proyecto es apoyado por profesores de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Leuven, Bélgica, quienes presentaron a los pobladores propuestas de infraestructura de los sitios de memoria que serán desarrollados en la Comunidad El Higueral, San Francisco Morazán; en el Municipio de Las Vueltas; en el Caserío Los Navarretes, Cantón Jaguataya, Municipio de Nueva Trinidad y en el Municipio de Arcatao.
En la comunidad El Higueral, la propuesta consiste en construir un techo ubicado en un espacio entre la Casa Comunal y la Iglesia que ampliaría el conjunto de los edificios en uno solo. “Es importante que el lugar de conmemoración no sea sólo un monumento histórico sino un lugar donde se pueda fortalecer la vida de la comunidad”, asegura Harold Fallon, arquitecto de Bélgica
El trabajo inició en 2017, en colaboración entre la Universidad de Leuven Bélgica y la Universidad de Western de Canadá, con el inició de la construcción del parque memorial para la masacre del Sumpul en Las Aradas que apunta a ser finalizada para la conmemoración del 2024 por el acceso a la zona.
De manera similar en los municipios de Arcatao, Las Vueltas y el Caserío los Navarretes de Nueva Trinidad, el proyecto contempla la ampliación espacios y construcción de museos de memoria histórica entre otros proyectos que desarrollen la historia de dichos sitios afectados por el conflicto armado.
Sitios de Memoria en Chalatenango
Durante el conflicto armado de la década de 1980 el departamento de Chalatenango fue uno de los más afectados con la persecución, asesinato y desaparición de poblaciones de distintas zonas.
Uno de los hechos no muy conocidos durante esta época es la masacre de El Higueral, en el municipio de San Francisco Morazán, Chalatenango, que ocurrió entre el 11 y el 18 de febrero de 1981 y se conmemora cada 14 de febrero.
José Arnoldo Arévalo Ávalos sobreviviente de los acontecimientos y líder del lugar comenta que “la primera vez que conmemoramos el 14 de febrero encendimos 50 velas, aunque no sabemos cuántas personas murieron. En ese tiempo en la localidad vivían unas 100 personas pero aquí vino gente del Salitre, de Tejutla, La Palma, fue como un refugio porque la gente venía huyendo de la persecución de los escuadrones de la muerte y los militares” y afirma que a pesar de no existir datos concretos en el lugar murieron más de mil personas.
En el municipio de Las Vueltas un 95% de la población actual son sobrevivientes, estuvieron refugiados en Mesa Grande, Honduras, regresando en el año de 1987. En la zona el Cantón conocido como Laguna Seca por su ubicación fue uno de los lugares estratégicos para el conflicto armado y “su importancia radica por lo que sucedió ahí como el asesinato de personas por la Guardia y eso nos ha llevado a darle vida al lugar, por eso lo tomamos como punto clave para realizar actividades de conmemoración”, explica el Alcalde del lugar, Juan Carlos Núñez.
En Las Vueltas el proyecto contempla la ampliación del espacio de conmemoración en Laguna Seca y la construcción de un museo enfocado en dar a conocer también el retorno y repoblación del municipio y las tradiciones actuales de las comunidades.
El 28 de agosto de 1984 el Río Gualsinga fue testigo de una de la masacre de más de 100 pobladores de en el Caserío Los Navarretes, Cantón Jaguataya del municipio de Nueva Trinidad.
Teófilo Córdova Delgado, habitante del lugar comenta que el espacio de conmemoración en honor a las víctimas es importante para recordar la memoria. Las familias que habitaban este lugar fueron testigos del desplazamiento de niños, adultos mayores, mujeres que venían huyendo del otro lado del Río Sumpul, de las masacres y capturas por parte del Ejército de El Salvador, comenta.
En este espacio histórico son realizados dos eventos, el viacrucis martirial entre marzo y abril durante Semana Santa y la conmemoración del 28 de agosto con una actividad cultural, testimonios de los sobrevivientes y el desarrollo de una misa en honor a los caídos en este lugar. El sitio de memoria Gualsinga se encuentra incluido en el proyecto de fortalecimiento y mejora de los espacios de memoria histórica que desarrolla la Universidad de Western Canadá en coordinación con las Asociaciones de Memoria Histórica del departamento.