El Laboratorio de Toxinas Marinas de la Universidad de El Salvador (LABTOX-UES) da a conocer los resultados de una investigación que realizaron en el ecosistema acuático del Lago de Güija, donde habitantes de la localidad reportaron una mortandad de peces el pasado 20 de junio.
El viernes 25 de junio, los investigadores del LABTOX-UES se desplazaron a la zona para determinar las posibles causas que provocaron la mortandad de los peces, que tuvo como consecuencia la pérdida de más de 30 proyectos de acuicultura de la zona, lo que significa un equivalente a treinta mil dólares, según declaraciones de los habitantes.
El equipo investigador del laboratorio que posee la UES tomó registros de parámetros fisicoquímicos en 7 puntos del lago Güija, en la superficie y a diferentes profundidades para estudiar las condiciones de microalgas y determinar si tenían relación con la mortandad de los peces, en su mayoría, Tilapia, Mojarra, Burra, Anguila, entre otros.
El resultado de los análisis se dio a conocer este 28 de junio, concluyendo lo siguiente:
· En las muestras analizadas, se detectó proliferación de la cianobacteria potencialmente tóxica Cylindrospermopsis cf. Raciborskii.
· La concentración celular máxima de la cianobacteria potencialmente tóxica Cylindrospermopsis cf. Raciborskii fue de 346,040 cél/L cerca del punto de desagüe y la concentración promedio fue de 250,400 cél/L.
· En los puntos próximos a la zona de cultivo de tilapia se encontraron altas concentraciones celulares de cianobacterias, este factor adicional probablemente pudo haber contribuido a la mortandad de peces en Lago de Güija.
· Según los valores guía de la OMS la abundancia encontrada de estas cianobacterias representa un nivel de riesgo moderado/alto con efectos adversos para la salud, irritaciones en la piel, enfermedades gastrointestinales o intoxicación.
· Se recomienda continuar con el monitoreo de agua en todo el Lago para tener registro temporal de las concentraciones celulares de Cylindrospermopsis cf. raciborskii.
LABTOX UES investiga mortandad de peces en el Lago de Güija
Durante una entrevista realizada en YSUES, el Laboratorio de Toxinas Marinas de la UES, informó sobre un estudio realizado en el Lago de Güija, ubicado en el Departamento de Santa Ana, con el objetivo de conocer el fenómeno a profundidad.
Óscar Amaya, Director del Laboratorio de Toxinas Marinas, y Licenciado en Física, graduado de la Universidad de El Salvador, detalló el pasado 27 de junio, que la idea nace a través de una alerta hecha al Laboratorio por la Unidad Ambiental de la institución, al enterarse de la muerte de varios peces en el lago, ocurridas durante el 18 y 19 de junio.
Según el experto, el Laboratorio fue contactado por la amplia experiencia que posee en este tipo de estudios.
‘’Nosotros, como Laboratorio, ya hicimos el primer monitoreo. El viernes anterior estuvimos recorriendo toda la parte que le corresponde a El Salvador en el lago, y hemos tomado un registro de parámetros físicos, químicos y biológicos, hemos recuperado muestras del agua y las estamos analizando en el laboratorio’’, fueron las palabras del director al explicar el inicio del estudio, acercándose directamente al lugar.
Las muestras fueron tomadas en 6 puntos del lago y se verificó la concentración celular, para identificar qué organismo está presente mayoritariamente.
El proceso de investigación contó con la colaboración de la comunidad e instituciones públicas.
“Nos desplazamos al lago de Güija y fuimos acompañados por guarda recursos del Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales, ellos nos proporcionaron la embarcación, con las comunidades en general. La universidad tiene algunos contactos, de hecho, la Unidad Ambiental se acercó a nosotros por este problema», mencionó el Director.
Según Amaya, este fenómeno ya había ocurrido una vez en el mismo lugar, en octubre del año 2018, cuando el invierno estaba terminando.
Para este experto, hay una diferencia interesante en lo ocurrido este mes: las muertes sucedieron durante pleno invierno.
También, detalló que el desarrollo de esta investigación es posible gracias a un programa de estudio nacional de aguas continentales, financiado por el Organismo Internacional de Energía Atómica, que tiene como prioridad detectar bacterias u otros organismos que puedan afectar la calidad del agua que se utiliza a diario.
Jennifer Guerra, Licenciada en Biología y parte del equipo científico del LABTOX, también se hizo participa activamente en el desarrollo del estudio. Los peces mayormente afectados son tilapias, animales criados para el consumo humano en la zona.