Las autoridades de la Universidad de El Salvador reconocerán en un acto conmemorativo a las familias de dos estudiantes, una de la Facultad de Medicina y otra de la Facultad de Jurisprudencia Ciencias Sociales, víctimas de desaparición forzada durante el conflicto armado.
Se trata de María Teresa Hernández Saballos (Facultad de Jurisprudencia Ciencias Sociales) desaparecida el 15 de septiembre de 1979 y de Gisela Isabel Gallardo Rodríguez (Facultad de Medicina) desaparecida el 18 de agosto de 1981.
Los títulos honoríficos y póstumos se entregarán a los familiares en un acto, este 30 de agosto en el Teatro Universitario, donde habrá un conversatorio para conocer de primera mano los hechos en los que desaparecieron.
También, se hará la presentación de una “revista que se pueda brindar como parte de insumos y evidencias de esas desapariciones y sobre todo como un espacio en donde los familiares han podido mostrar un poco el desahogo de ese dolor y la nostalgia que ellos sienten”, detalló MVZ. María José Vargas Artiga, presidenta de la Asamblea General Universitaria y Coordinadora Comisión de Investigación sobre Graves a Violaciones a Derechos Humanos cometidos contra la comunidad universitaria, entre 1975 y 1995.
Vargas agregó que se debe de reconocer “todos estos daños y acompañar a los familiares de las víctimas, como parte de la comunidad universitaria busca que la universidad pueda reconocerse como una víctima también, primero porque todos estos sucesos fueron en contra de la comunidad universitaria; no se tuvo explicación por parte de ningún gobierno ni ninguna responsabilidad de nadie y los familiares simplemente tuvieron que callar y que soportar un dolor y una nostalgia de una pérdida y sin acompañamiento y sin ninguna explicación”.
Por su parte la Mtra. Sofía Briones, oficial de información de la UES y secretaria de la comisión aseguró que a la fecha ambas familias aseguran que “el crimen continúa en la impunidad y no tienen conocimiento sobre el paradero de sus familiares y al día de hoy continúan desaparecidos y se sigue buscando justicia”.
La Comisión de Investigación se creó en el año de 2017 y en el 2018 el rector de la UES, Mtro. Roger Arias presentó un aviso ante la Fiscalía General de la República de desaparición sobre el caso de María Teresa Hernández Cevallos y de 60 casos de desaparecidos, asesinados o torturados, “pero hasta la fecha no ha habido mayores avances”, expresó Briones, a pesar que ambas familias agotaron todas las instancias correspondientes en su momento.
El acompañamiento de la UES y la realización de estos actos forma parte de “una medida de reparación y por otra parte el acompañamiento a las familias en la búsqueda de la justicia y la verdad”, señaló Briones.
El 30 de agosto es el Día Internacional del Detenido Desaparecido según la Asamblea General de las Naciones Unidas y surge como una necesidad de poner un alto a las desapariciones forzadas y evidenciar esta práctica realizada en distintos países de América Latina durante gobiernos dictatoriales y de aparente democracia y posteriormente en todo el mundo.
Este delito de lesa humanidad “es un delito múltiple y entre sus vertientes se encuentra también la tortura permanente de la familia del desaparecido, es un delito continuado hasta que no se encuentren los restos de las víctimas y no se sepa que pasó con ellos, entonces no es un hecho del pasado, sino que es un hecho del presente”, concluyó Briones.
