Por: Ana María Campos
La Licenciada Sara Bernal, docente del Departamento de Psicología de la Universidad de El Salvador, señala que la cuarentena generará efectos negativos en la salud mental de algunas personas, que van desde la afectación en las emociones, conductas de negación sobre la situación de emergencia por el coronavirus, hasta cambios de estados de ánimo, estrés, depresión, tristeza, ansiedad, pánico, baja autoestima, ira, desesperanza, frustración, violencia intrafamiliar y de género, trastornos de sueño y problemas de comunicación al interior del grupo familiar, entre otros.
Para la académica, la cuarentena que actualmente se vive a causa de la emergencia nacional por el coronavirus tiene un impacto diferente en la salud mental de cada persona.
“Cada persona tiene una percepción diferente de las cosas, del mundo, de cómo interpreta, cómo siente, los umbrales o tipos de percepción que tienen de la realidad, de lo que pasa, de cómo lo analizan o relacionan con hechos anteriores, con experiencias vividas; Cómo piensa, es decir, qué tanto conocemos y qué tanta información tenemos en este momento en relación al fenómeno de la pandemia”, puntualizó.
Sin embargo, recalcó que el grado de afectación varía en relación a si existe una conducta de aceptación o rechazo ante el fenómeno del Covid-19 o cuál es mi actitud ante éste, de ahí el grado de afectación o no, a la persona. “¿Cómo actúo?, rechazando o aceptando, teniendo ideas irracionales y negativas, me enfado, me da ira, me desquito con las demás personas, en las relaciones interpersonales, o si trato de aceptarlo y hacer algo por enfrentarlo y tomar las medidas adecuadas”.
Los efectos negativos se producen ante la falta de socialización de las personas y la interrupción de su rutina diaria. La situación se agrava cuando al interior del grupo familiar ya existen problemas anteriores, falta de comunicación, hacinamiento, y falta de acceso a recursos, como los tecnológicos, que faciliten el esparcimiento de las personas. Lo que provoca un deterioro en la armonía y la vida en familia.
Para la Licenciada Bernal, si ya en el diario vivir, la salud mental de las personas se ve afectada por el entorno social, político y económico del país, en tiempos de crisis como el que se vive en la actualidad, resulta imposible creer que no se producirá una afectación.
En este sentido, para disminuir los efectos negativos del confinamiento recomienda además de distraerse en actividades productivas, la necesidad de “sensibilizarse y racionalizar lo que está pasando y para eso debemos estar informados, porque si estamos desinformados, mal informados, eso agrava la situación, porque entonces tenemos una falsa percepción de lo que está pasando y caemos en la trampa de las noticias falsas que nos llegan”.
Aquí destaca la importancia de no tener una actitud negativa, sino al contrario adoptar una actitud positiva, propositiva, de esperanza y visión hacia el futuro y seguir las medidas sanitarias preventivas y de distanciamiento social.
Debido a que la depresión es uno de los problemas de salud mental más frecuentes, la docente afirma que entre los síntomas están, el desgano, la apatía, el pánico, la tristeza, episodios de llanto, exceso de sueño o falta de sueño, interés desmedido por conocer las cifras sobre la pandemia.
En estos casos, recomienda prestar atención al comportamiento depresivo y buscar ayuda, ya que es uno de los signos previos al suicidio. “La desesperanza, la frustración por el encierro sumado a la falta de trabajo, incapacidad por obtener recursos básicos para el sustento de la familia, falta de acceso a recursos, pueden provocar que la persona, tenga ideas suicidas o intente quitarse la vida. Por eso es importante detectar a tiempo estos síntomas”, recalca.
De igual forma, lamentó las fobias que se han generado contra el personal de salud, lo que considera son problemas que van surgiendo de la crisis, del pánico por el desconocimiento del desarrollo del virus.
La académica propone que en los pueblos y lugares menos poblados, como medida para garantizar la salud mental de las personas, se haga un levantamiento progresivo de la cuarentena, tomando en cuenta las medidas de prevención.
“Por salud mental de nuestra población, los departamento en donde hay menos personas, proponía que, igual como salimos con todas las precauciones al supermercado, y ahí nos juntamos con una fila de personas, todos con mascarilla y guantes, podemos hacerlo, guardando los dos metros de distancia, lo hemos interiorizado, si tomamos todas esas precauciones, pienso que es bueno ir saliendo de ese encerramiento poco a poco, eso nos va a distraer y hacer que recobremos poco a poco nuestra vida normal y hace más fácil la incorporación futura al trabajo”, expresa.
Afirma que posterior a la pandemia se presentarán «conductas postrauma», a causa del encierro, para lo cual propone que desde el Ministerio de Salud se elabore un censo para atender a pacientes con problemas de pánico, depresión y violencia de género.
Considera necesario que este ministerio convoque a personas expertas en salud mental para brindar asesoría y “que se explique desde los conocedores el origen, desarrollo, efectos y precauciones reales ante la exposición a este virus, el manejo de la información trae conocimiento y seguridad a qué nos estamos enfrentando”, recalcó.
Respecto a la atención en salud, sostiene que en este momento se ha priorizado la pandemia y se ha dejado de lado otras enfermedades con la suspensión de citas médicas.
“Eso no es correcto, debe haber atención, a todo nivel y a todo tipo de enfermedades y padecimientos. Los sectores más vulnerables, niños y niñas, adultos mayores esos sí se están atendiendo, pero al problema de la salud mental normalmente no se le da una atención adecuada”, resaltó.
En este sentido señaló la necesidad de crear programas de atención en salud mental integral, dirigidos a toda la población, por grupos etarios, niñez, juventud, adultos y personas mayores.
“Hay muchas formas de trabajar el estrés, la depresión, el autoestima, la agresividad, problemas de sueño y el profesional de la psicología es el que está preparado para realizar esos procedimientos y técnicas y el Ministerio de Salud debería comenzar a trabajar desde ya en identificar personas y registrar focos de atención”, dijo.
Entre las recomendaciones que brinda para tener una adecuada salud mental, además de realizar actividades productivas y entretenidas, sugiere estar informados, racionalizar o razonar lo que está sucediendo desde fuentes científicas, tomar las medidas preventivas sin caer en el pánico, conductas solidarias y de ayuda mutua, reír y adoptar una sensación positiva de la vida.
Desde la universidad propone generar investigaciones multidisciplinarias sobre el tema, en adición a las acciones inmediatas tomadas por la UES como la elaboración de alcohol gel, desinfectantes, máscaras protectoras para el personal de salud y otras en el área de atención de la salud mental en línea.
“Conocer y entender este virus nos ayudará a generar una conciencia de cómo debemos tratarlo, no es un demonio, hemos salido de muchas crisis en este país y por qué no vamos a salir de esta. Tenemos que tener una actitud positiva y una percepción adecuada del fenómeno, no centrarnos en lo negativo, ni en la desesperanza, por el contrario ser propositivos y saber afrontar las situaciones críticas con sentido humanitario”, puntualizó.
Este 27 de abril, la comisión Política de la Asamblea Legislativa aprobó prorrogar por 15 días más la vigencia del decreto 593 que establece el Estado de Emergencia, y con él la cuarentena domiciliar. La propuesta debe ser avalada por el pleno de la Asamblea Legislativa esta semana.
zczxc