Por: Mónica Torres
El Laboratorio de Toxinas Marinas de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas de la Universidad de El Salvador, realizó un monitoreo de marea roja en la zona costera de Acajutla y la Barra de Santiago, durante el 31 de mayo, a raíz de un reporte de fallecidos por intoxicación a través del consumo de mariscos, en la Costa de Guatemala y México.
El 3 de junio, el equipo del Laboratorio presentó el informe de resultados finales del estudio, elaborado a través del método de Utermöhl, para estimar la concentración celular de especies de Fitoplancton, y si éstas influyen en la proliferación de algas que producen la marea roja.
La realización del monitoreo contó con la colaboración de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma, institución salvadoreña que promueve el desarrollo de infraestructura de puertos, aeropuertos y ferrocarriles, también estuvo a cargo de la ejecución el Maestro Óscar Amaya, director del Laboratorio.
Como primer resultado, Amaya menciona que: ‘’se han encontrado especies tóxicas, aunque en cantidades no elevadas, si son especies que producen veneno’’, de esta manera, también descarta la presencia de una marea roja en las costas salvadoreñas, las células por litro que fueron halladas, no son suficientes para desencadenar este fenómeno.
Entre los contaminantes encontrados, se encuentran las algas Gymnodinium y Pyrodinium bahamense, cuyos venenos producen efectos paralizantes en el ser vivo que tenga contacto con ellas a través de la ingestión, en palabras del director, éstas algas ya han ocasionado marea roja y como consecuencia, provocaron decesos en años anteriores dentro del territorio salvadoreño.
También agrega que los países centroamericanos con zonas costeras están haciendo sus propios estudios, Guatemala por su parte presenta Pyrodinium en sus costas, Nicaragua reporta estas especies en mayores cantidades que las costas salvadoreñas.
‘’Se podría resaltar que no hay que bajar la guardia, hay que incrementar más los monitoreos, se llama a las instituciones responsables, Ministerio de Medio Ambiente, Ministerio de Salud y CENDEPESCA, encargadas de estar velando por la seguridad de productos pesqueros, a hacer todo esto que nosotros hemos hecho, pero en toda la zona costera del país’’, manifestó Amaya, con el objetivo de prevenir futuras consecuencias de una posible marea roja.
Por otra parte, el estudio también arrojó cuerpos marinos que no presentan toxicidad para el océano, como el Rhizosolenia y Lioloma, especies llamadas ‘inocuas’’ y sin potencial tóxico, quienes representaron mayoría en concentración celular por litro.