Por: Tanya Lozano
La enfermería es un arte y una lucha por salvaguardar los derechos de los pacientes, implica la búsqueda de la profesionalización del cuidado del paciente, tomando en cuenta que la profesión de enfermería es una continua historia humana de vocación al servicio de los más desprotegidos y que en dado momento necesitan satisfacer necesidades inherentes de protección,.
En El Salvador, la Asamblea Legislativa, declaró el 6 de mayo de 1948, que esta profesión es “una de las más arduas, abnegadas y nobles en provecho de la sociedad y que los grandes beneficios que sus miembros aportan a la humanidad son dignos por eso del estímulo público de la patria” y designó el 15 de mayo como el Día del Profesional de la Enfermería.
Para la década de los 80´s inicia la formación de profesionales de enfermería en instituciones privadas y públicas lo que dio lugar a una diversidad de programas curriculares con visiones diferentes, por lo tanto, cada profesional de enfermería egresaba con diversidad de conocimientos que le generaba dificultad para su incorporación en la vida laboral, este problema se agudizó con el cierre de las escuelas nacionales en respuesta a una política gubernamental.
En este contexto, se identificó la necesidad de formar recursos de enfermería con un mismo perfil de formación. Es aquí que con el apoyo de JICA, a través del proyecto “Fortalecimiento de la educación para enfermería” se elaboran planes de estudio estandarizados para cada nivel de formación los cuales fueron autorizados por el Ministerio de Educación y se mantienen vigentes a la fecha.
Durante la formación de los futuros profesionales, comprometidos de manera integral a atender las exigencias locales sobre problemáticas que afecten a la salud salvadoreña, se busca que estos estudiantes apliquen habilidades, conocimientos y destrezas profesionales ya adquiridas y que contribuyan con propuestas e ideas nuevas para mejorar la realidad de muchas áreas de atención en salud.
Estos estudiantes, a pesar de no recibir remuneración económica salarial y no tener acceso a la seguridad social, ni la garantía de adquirir empleo inmediato, cumplen con su labor aun en tiempos de pandemia atendiendo a los pacientes con el mismo esmero y dedicación de siempre evitando la morbi-mortalidad en los que tiene lugar los índices epidemiológicos.
Un aproximado de 2000 estudiantes en servicio social de las diferentes carreras de Técnico, Tecnólogo y Licenciatura en Enfermería laboran de carácter Ad-Honorem en el Ministerio de Salud en los tres niveles de atención.
Los profesionales de Enfermería son los responsables de ofrecer a la persona (familia, grupo o comunidad) cuidados específicos basados en las realidades y necesidades que viven, dirigidos con juicio crítico, analítico clínico.
Este año prometía un año diferente para la Enfermería, ya que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo declaró “Año internacional del profesional de Enfermería”, dando realce a la celebración del bicentenario del nacimiento de Florence Nightingale pionera de la enfermería profesional moderna, considerada como la fundadora de la utilización del método científico y la fundamentación de las acciones en la intervención a pacientes.
Según datos de la OMS, se calcula que los profesionales de enfermería representan casi la mitad de todos los trabajadores de la salud en el mundo y para cumplir los objetivos de desarrollo sostenible se proyecta que para 2030 harán falta 9 millones de profesionales de enfermería en todo el mundo.
La formación de nuevas generaciones que construyan conocimientos enfocados en la investigación, tomando en cuenta la atención directa, la docencia y la gerencia administrativa; constituye la formación de nuevos líderes que propongan mejoras en el sistema de salud, desde la interpretación de lineamientos y normas que rigen las políticas de salud, porque ser profesional de enfermería es una fusión de ciencia, fortaleza y humanidad.
Enfermería, Recurso vital
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