Por Rodrigo Portán
El Laboratorio de Geología de la Escuela de Ingeniería Civil y el Centro de Investigaciones y Aplicaciones Nucleares (CIAN), de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura de la Universidad de El Salvador, con el apoyo de la Cooperación Japonesa, realizan estudios de termoluminiscencia para la exploración de reservorios geotérmicos.
La técnica se aplica sobre minerales como feldespatos, cuarzo y calcita, minerales que pueden almacenar energía lumínica, y de los cuales se puede obtener información al aplicar la técnica de termoluminiscencia.
La Ingeniera Lesly Mendoza, investigadora del proyecto, explica que “la técnica de termoluminiscencia es el efecto de la radiación acumulada por un mineral durante su vida, y ésta puede ser obtenida de su entorno o por la radiación solar, estos minerales almacenan información, y cuando son estimulados con calor, esa luz es irradiada y recolectada. Si nosotros sabemos que esa muestra no tiene mucha termoluminiscencia, significa que ha estado expuesta a un calor; entonces la luz se ha liberado (no ha almacenado esa información). De esa manera decimos que, a bajos valores de termoluminiscencia, hay posibilidades de que ahí hay una fuente de calor, porque si las muestras han estado expuestas a calor, esa información se libera”.
Entre las técnicas que se utilizan, adicionalmente para el estudio se encuentra la “Difracción por Rayos X” (XRD) con el que se determinan los tipos de minerales presentes en la roca. Además, cuentan con la técnica de “Fluorescencia de Rayos X” (XRF) con la que es posible analizar y determinar la composición química y correlacionar el tipo de roca con que se está trabajando.
Para realizar estos estudios, es necesario ir a campo y recolectar las muestras. A estas se les da un tratamiento, luego se sacan los minerales. Posteriormente se verifica si corresponde a cuarzo, feldespato o calcita, a través de la técnica de XRD. Si estos minerales están presentes, se puede aplicar la técnica de termoluminiscencia, dijo la profesional.
Dentro del proyecto también se tiene equipo que ha sido donado por la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA), que sirve para identificar minerales y para saber la cuantificación, y el porcentaje de los diferentes óxidos que componen a las rocas a través de difracción de rayos x, fluorescencia de rayos x.
Para ello, a la roca se le debe hacer un tratamiento: “La extraemos, le sacamos una muestra pequeña. La trituramos un poquito, y la molemos para sacar un polvo que nos sirve como una base para hacer ensayos de difracción de rayos x o fluorescencia. Esta última se puede trabajar de dos formas: haciendo muestras de ese polvo que se coloca en un anillo y se comprime. La otra forma de hacerlo es por glass bead, que se elabora tomando una pequeña cantidad de la muestra que se funde a 1050 grados Celcius, con un compuesto de fluoruro de litio, tetraborato de litio y borato de litio en diferentes concentraciones”, agregó la ingeniera Mendoza.
Con este equipamiento y técnicas, la Universidad a través de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura, junto con la cooperación japonesa, proyectan realizar investigaciones que permitan localizar reservorios geotérmicos y aportar al desarrollo profesional, que permita realizar avances en la investigación científica en el país.