El Laboratorio de Toxinas Marinas de la Universidad de El Salvador (LABTOX-UES) ha compartido los resultados del último análisis de Fitoplancton y Parámetros Fisicoquímicos realizado en el Lago de Coatepeque. El informe revela la presencia dominante de cianobacterias, lo que sugiere una amenaza para la diversidad biológica del ecosistema, con niveles de proliferación que exceden los estándares de seguridad.
Las muestras, recolectadas por los investigadores en seis puntos estratégicos del lago, han revelado la presencia predominante de cianobacterias, especialmente limnoraphis cf. Birgei, con una concentración que varía entre 3,152,613 y 4,883,665 cél/ml.
Este hallazgo, según el Lic. Óscar Amaya, director de LABTOX-UES, subraya la importancia de continuar con un monitoreo constante de estas especies para comprender su evolución en el tiempo y en el espacio.
En el reciente informe, se señala un nivel de riesgo moderado/alto para los bañistas durante la fecha de muestreo, según los estándares establecidos por la Organización Mundial de la Salud. Por ello, es crucial seguir las recomendaciones emitidas por las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales para garantizar la seguridad de todos.
Durante el recorrido realizado el 15 de marzo, se observó la presencia de grumos marrones en diversas áreas del lago, indicativos de una proliferación de cianobacterias. «Es un recordatorio de la importancia de mantener vigilancias y tomar medidas para preservar la salud de este ecosistema tan preciado», señaló el investigador. Amaya mencionó que es alentador destacar que, en todos los puntos de muestreo, los valores de microcistinas estuvieron por debajo del límite permisible propuesto por la OMS para aguas de consumo humano. Esto refuerza el compromiso de LABTOX-UES con la salud pública y el cuidado responsable de los recursos hídricos.
El reporte también incluyó el análisis y la evaluación de parámetros fisicoquímicos claves, como clorofila-a, nitrógeno y fósforo totales, para obtener una imagen completa de la salud del lago.
Las muestras fueron recolectadas por cinco investigadores de LABTOX-UES y se contó con la colaboración de Fundación Coatepeque y Autoridad Salvadoreña del Agua.