Por César Villalona
El empresario Javier Simán, quien preside la ANEP, dice que en los 10 años de Gobierno del FMLN la deuda pública total (Gobierno Central e instituciones financieras y no financieras) casi se duplicó, al pasar de 10,000 a 19,000 millones de dólares. Simán da una cifra incorrecta y omite que durante los Gobiernos de ARENA la deuda se multiplicó por 6.2.
El incremento de la deuda no es malo en sí mismo. Depende de cómo se inviertan los recursos y de las posibilidades de pago que tenga el Estado. En el país no hay estudios de impacto de la deuda, pero su evolución no es la que dice el empresario.
Durante el Gobierno de Alfredo Cristiani, 1989-1994, la deuda aumentó 41%, de 1,800 a 2,530 millones, a pesar de que sus ingresos tributarios se triplicaron, al pasar de 2,457 a 7,742 millones de colones, y de haber recibido donaciones por más de 1,000 millones de dólares tras el fin de la guerra.
El Gobierno presidido por Calderón Sol elevó la deuda hasta 3,583 millones (42%), el de Francisco Flores la subió a 7,286 millones (103%), o sea, la duplicó, y el de Antonio Saca la aumentó a 11,174 millones (53%).
Al llevar la deuda de 1,800 a 11,174 millones en los años 1989-2009, los Gobiernos de ARENA la aumentaron en 521%, o sea, la multiplicaron por 6.2. Los Gobiernos del FMLN la aumentaron de 11,174 a 19,808 millones entre 2009 y 2019 (77%). Es decir, no la duplicaron en 10 años.
Hay otros aspectos que debemos señalar. Más de 4,000 millones de la deuda de los Gobiernos del FMLN se debieron a que las AFP les prestaron cada año, por el Fideicomiso de Obligaciones Previsionales (FOP) aprobado en el último Gobierno de ARENA, cientos de millones de dólares para pagar las pensiones del ISSS y el INPEP y para cubrir otros compromisos previsionales.
Desde 2007, cuando inició el Fideicomiso, hasta diciembre de 2019, la deuda FOP aumentó forzosamente y llegó a 5,265 millones. Ese período les corresponde principalmente a los Gobiernos del FMLN. Y el señor Javier Simán sabe que el FOP lo aprobaron 48 diputados de ARENA, del PCN y del PDC.
La deuda previsional se debe a que en 1998, el Gobierno de Calderón Sol les trasladó a las AFP los fondos de pensiones que administraban el ISSS y el INPEP. Como ambas instituciones se quedaron sin reservas técnicas, el Gobierno asumió el pago de pensiones, primero vendiendo bonos y luego con el FOP.
Toda esa política, que afectó a la población cotizante y endeudó al Estado, fue apoyada por la ANEP, FUSADES y otros gremios e instituciones de derecha.
Sobre la relación deuda pública /PIB, durante los 20 años de Gobierno de ARENA pasó de 26%, cuando inició la gestión de Cristiani, a 64% cuando terminó la gestión de Saca. En el Gobierno de Cerén llegó a 73%, pero sin la deuda FOP sería de 54%.
Hoy estamos ante un Gobierno que se endeuda aceleradamente. Para marzo de este año la deuda pública era de 20,534 millones. Pero ese dato no incluye los 3,791.5 millones que le han aprobado y cuyos fondos no ha conseguido. Los montos aprobados son: 12.5 millones del BCI para obras en la Fiscalía; 43 de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón para la emergencia; 91 para la segunda fase del plan de seguridad; 645 para cerrar la brecha fiscal; 3,000 de bonos y préstamos para la emergencia.
Si el Gobierno recibiera esos recursos este año y amortizara los 321.5 millones asignados en el presupuesto 2020, la deuda crecería en 3,470 millones y cerraría el año en 24,004 millones, equivalentes al 93% del PIB, que rondaría los 25,700 millones, debido a la caída de -4.3% estimada por el Banco Mundial.
Una parte de la nueva deuda se justifica, porque es para cubrir la brecha fiscal, para seguridad y emergencia. Pero los últimos 1,000 millones aprobados por la derecha en la Asamblea son innecesarios, porque duplican rubros a financiar con los 2,000 millones, elevan mucho la deuda y el Gobierno no los puede ejecutar en el corto plazo.