Por Leonardo Guevara
Formó parte del equipo de la Universidad de El Salvador que tuvo un fugaz paso por la liga mayor de baloncesto, ahora viste los colores del BullDogs de la segunda categoría y cursa las últimas asignaturas de su carrera. Arnold Guerrero habló con El Universitario sobre su experiencia con el equipo universitario.
En el año 2015, el actual presidente del Instituto Nacional de los Deportes (INDES) y entonces presidente de la Federación Salvadoreño de Baloncesto (FESABAL). Licenciado Yamil Bukele, envió una invitación a las autoridades universitarias y del Complejo Deportivo de la Universidad de El Salvador para que el equipo de baloncesto formara parte de la Liga Mayor de Baloncesto.
La invitación fue evaluada por las autoridades, cuerpo técnico y jugadores, quienes después de analizar la situación decidieron dar el sí y participar en el torneo Apertura 2015 y Clausura 2016. El equipo, cuyo cuerpo técnico era liderado por el profesor Walter López, venía de ser campeón de la categoría sub23 de la FESABAL y tenían asegurado por eso el ascenso a la segunda división.
El equipo estaba conformado por un total de 12 jugadores, durante el primer torneo todos eran estudiantes activos de la Universidad de El Salvador, Arnold Guerrero era uno de ellos. “Estaba en el primer año de la Licenciatura en Ciencias de la Educación con especialidad en Educación Física, Deportes y Recreación”, comenta Arnold.
Los horarios y días de juego eran variados, porque la programación era de martes a domingo. Si el equipo jugaba de local, en días de semana lo hacían a las 7:30 pm, los sábados a las 7:00pm y los domingos a las 3:00pm.
“El ambiente en la duela era sensacional, ver cómo la gente apoya a su equipo, cómo mete presión, cómo se mete en el juego, la gente realmente apoyaba mucho”, recuerda Arnold.
Arnold menciona que cada jugador aportaba según sus capacidades y que la mayoría jugaba por amor al deporte. “Jugábamos por amor a la camiseta”, dice Guerrero.
A pesar de que el equipo a nivel colectivo no obtuvo ningún logro significativo, Arnold califica su paso por el cuadro universitario como una experiencia positiva. En Santa Ana obtuvo un récord personal en anotaciones en un partido, donde hizo 42 puntos.
“Creo que a nivel personal me ayudó mucho porque crecí como jugador, me ayudó a madurar, porque como dicen de las derrotas siempre hay algo que aprender y actualmente me ha servido mucho, formo parte de un equipo que está en segunda categoría, en donde hemos logrado muchas cosas. Este equipo posee siete campeonatos nacionales, de los cuales he participado en dos”, concluye Arnold.
La mayoría de jugadores que formaron parte de este equipo siguen activos en la primera o segunda división y seguramente muchos, así como Arnold, siempre llevan presente su paso por la Universidad de El Salvador.
